Viajes 丨 El viaje de mis sueños con Ethereal Drum en Okinawa, Japón

En este período cómodo, lo que da vida a la mayoría de las vidas es el poema de la música, que se mezcla con los altibajos de la vida. El encanto de la música es hacer que un período de viaje ordinario sea más colorido. La vida necesita comenzar un viaje de una manera diferente, y la música es la mejor manera.

Para darme la oportunidad de relajarme, me llevé mi instrumento musical favorito, el tambor etéreo, a Okinawa, Japón, y me fui de viaje.

Durante este viaje, no me preocupé demasiado. No pensé en si tenía suficiente dinero o no. Después del viaje, mi vida se volvería más exigente. Lo que pienso es que esta vez quiero mostrarme y disfrutar plenamente de este viaje sencillo y relajante.

Cuando saliste de la aduana del aeropuerto de Naha, el aire caliente te golpeó la cara, lo que también tiene mucho que ver con la ubicación geográfica de Japón. Por la tarde, cuando caminé hacia una calle comercial en Okinawa, Japón, las luces emanaban hermosas luces y sombras, y las calles estaban llenas de varias tiendas y la gente iba y venía.

Avanzando, solo para ver a un joven tocando una guitarra, algunas personas se acercan para escuchar, algunas personas continúan caminando hacia adelante. Cuando escuché esta música maravillosa, estaba extremadamente emocionado y sentí un conocimiento antiguo de un país diferente.

Después de terminar de tocar una pieza musical, sacó el tambor etéreo de su mochila y tocó un conjunto con él en la calle comercial de Okinawa. Los dos instrumentos no entraron en conflicto entre sí, pero añadieron un encanto especial.

Cada vez hay más gente mirando. Esto es algo muy increíble. Durante la actuación, siento que realmente me he integrado a la ciudad, liberando mi ser más primitivo y puro, sin distracciones y con todas las emociones. Incorporar a la música. Me mezclo con la extrañeza, la curiosidad, la emoción y la embriaguez de una nueva ciudad.

Después de regresar de este viaje, se han olvidado muchas cosas durante el viaje, pero la que nunca se olvidará es la experiencia de tocar música en la calle comercial de Okinawa en Japón. Aunque no hubo luces ni equipo de escenario durante la presentación, hubo música en este momento y todo a su alrededor se convirtió en una imagen hermosa.

Un buen instrumento musical definitivamente no es una carga en el proceso de viajar, sino una herramienta para hacer un viaje diferente. Antes viajar era ver el paisaje con los ojos y quedarse con la cámara, ahora es sentir el paisaje con el instrumento musical.

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